¿Cómo promover iniciativas de impacto social y ambiental en nuestras escuelas de negocios?

El CEGINT promueve, mediante la metodología de la curva S, iniciativas empresariales sostenibles con impacto social y ambiental.

Por Lorena Verde Flota 
Profesora de la Escuela de Negocios 

La aceleración empresarial se ha concebido tradicionalmente como un proceso orientado a impulsar el crecimiento rápido y sostenido de empresas con alto potencial, especialmente aquellas que buscan liderar el mercado y posicionarse como referentes tanto a nivel nacional como internacional. Este enfoque ha estado particularmente dirigido a empresas de base tecnológica, cuya relevancia ha aumentado en el contexto de la llamada Economía del Conocimiento, donde la capacidad de adaptación al cambio, la innovación y el desarrollo tecnológico se consideran factores críticos para la competitividad. 

El concepto de Economía del Conocimiento comenzó a cobrar fuerza a partir de la conformación de la sociedad de la información en la década de 1960. Uno de sus principales exponentes fue Christopher Freeman, quien fundó la Unidad de Investigación de Políticas Científicas (SPRU) en la Universidad de Sussex, en Inglaterra. Desde esta institución, Freeman lideró investigaciones pioneras en ciencia, tecnología e innovación, y participó en la elaboración del Manual de Frascati, promovido por la OCDE, que estableció estándares internacionales para la medición del impacto de la investigación y el desarrollo (I+D). 

En este contexto, marcado por el avance de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), surgieron investigaciones clave sobre los factores que influyen en la generación de innovaciones, tanto desde una perspectiva microeconómica y empresarial como desde el ámbito de las políticas públicas. Es en este marco donde se acuña el concepto de Sistemas Nacionales de Innovación (SNI), desarrollado por Bengt-Åke Lundvall en colaboración con Freeman durante la década de 1970. 

Conceptos como startups, emprendimiento, innovación, desarrollo tecnológico y conocimiento se entrelazaron en la búsqueda de comprender los mecanismos que impulsan el desarrollo económico, tanto de las empresas como de las naciones. 

Uno de los modelos que se utilizó para comprender el proceso de generación de innovación en nuevas empresas o startups, fue la curva S. Esta metodología lo que nos muestra es la existencia de fases en el ciclo de vida de la tecnología, que a su vez está asociado al ciclo de vida de las empresas. Su autor, Richard Foster en 1986 en su libro Innovation: The Attacker’s Advantage, nos muestra que existen innovaciones que después de la fase de ideación y emprendimiento entran en fase de franco y acelerado crecimiento que al paso del tiempo tiende a estandarizarse.  

Las fases por las que atraviesa el rendimiento de una tecnología que se incorpora a un nuevo producto, proceso o servicio también se relacionan con las fases por las que atraviesa la estandarización del desarrollo tecnológico, por lo que en algún punto se tendrá que generar una innovación que permita atribuir nuevas características o funcionalidades al producto, proceso o servicio existente, o incluso renovarlo totalmente y así comenzar con una nueva fase en el desarrollo.  

Consideramos que esta herramienta nos muestra la importancia de analizar el grado de madurez de las empresas y la tecnología que se utiliza, así como su impacto tanto al interior como al exterior de la empresa.  Creemos firmemente que sigue vigente y permite entretejer estrategias que tienen como propuesta general ser dinámicas y sostenibles.  

En este sentido el concepto de aceleración y sostenibilidad son conceptos que en la actualidad están implicados, incorporados al cuerpo de la empresa de tal forma que se puede mantener un crecimiento ascendente de largo plazo.  

Sin embargo, aun cuando las tecnologías digitales han llevado a suponer que existen negocios con costos marginales cero, la teoría económica clásica nos mantiene atentos a la limitación en la dotación de recursos. Así cobra relevancia el binomio Aceleración + Sostenibilidad, que permite identificar estrategias de crecimiento sin comprometer el futuro de la propia organización en el mercado. ¿Esto es posible? Si contamos con una producción y consumo consciente en un marco de intercambio circular, sí podría alcanzarse el ideal de producir sin dañar y consumir para la recuperación. La aceleración sostenible pone en el centro de la estrategia empresarial el análisis de impacto ambiental, social y económico, incluso antes de desarrollar y ejecutarla para lograr esto.  

Es decir, se deberá partir de lo que se tiene que cuidar y garantizar (proveer) para poder seguir con el proceso de aceleración que debe ser consciente y responsable sobre los impactos que genera no solo para la empresa, sino para la sociedad y el medio ambiente. En este sentido, el crecimiento y la etapa acelerada empujada por la innovación y las tecnologías tendrán que responder a condiciones que permitan también medir los impactos deseables y no deseables del uso de los propios recursos. Ningún negocio se sostendrá en el futuro si los recursos que utiliza para la producción no son utilizados desde una mirada amigable con el medio ambiente, la sociedad y la propia economía.  

Desde esta mirada que busca reconciliar los estudios y proyectos de negocios con la sociedad y el medio ambiente es que la Unidad de Aceleración Sostenible del Centro para la Gestión de la Innovación y Tecnología del ITESO ha propuesto generar ejes de impacto para las empresas atendidas.  

El foco de atención, o los actores de interés, para el centro son las empresas como entes económicos que generan riqueza, bienes y servicios a través de la generación de trabajo y rentabilidad. Sin embargo, estamos conscientes de que la realidad de nuestro país es una estructura empresarial heterogénea en cuanto a capacidades, pero homogénea en cuanto a tamaño. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI, 2020): “las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) son el grupo al que pertenecen más del 99.8% de las empresas del país.  

Estas últimas han sido recientemente de mayor interés para el CEGINT. Toda vez que conviven en un sistema que en ocasiones las lleva a experimentar condiciones de vulnerabilidad que afectan a su entorno. De ahí que busquemos incidir a través de tres ejes fundamentales en ellas: 

Primer Eje: Herramientas de Diagnóstico para Evaluación 

Como señala el físico y matemático británico, William Thomson Kelvin: “Lo que no se define no se puede medir. Lo que no se mide, no se puede mejorar. Lo que no se mejora, se degrada siempre.”  

Para poder construir estrategias de aceleración con alto impacto en beneficio de la sociedad, la economía y el ambiente es necesario definir lo que entendemos por aceleración sostenible, así como los indicadores implicados en esta. Existen estándares ya consolidados a nivel internacional que actualmente se utilizan incluso para lo que se ha llamado los bonos verdes en el sistema de financiamiento público. A partir de estos es que el CEGINT desarrolló una herramienta de diagnóstico apoyados en los estándares internacionales públicos llamados GRI (Global Reporting Indicators). A partir de estos indicadores se pueden crear múltiples líneas de intervención, investigación y desarrollo de conocimientos que permitan mejorar las prácticas empresariales actuales de forma transdisciplinar.  

Segundo Eje:  Transferencia de Conocimientos 

Una vez realizado el diagnóstico, evaluación y análisis de los resultados se proponen estrategias de aceleración sostenible en colaboración con estudiantes, maestros especializados e integrantes de la empresa. Se buscarán soluciones innovadoras siempre respetuosas del medio ambiente y con énfasis social ubicando a las personas en el centro de las organizaciones.   

Tercer Eje: Aceleración Sostenible 

Un elemento crucial en la metodología de Aceleración Sostenible es la disposición al cambio, a la mejora continua y a la actualización. El entorno actual, con nuevos retos a corto plazo, impulsa al CEGINT a mantener una búsqueda constante de recursos, conocimientos y alianzas, siempre desde la metodología de la Hélice, en la que sociedad, gobierno, universidades y empresas actúan como motores que permiten continuar acelerando de manera sostenible en beneficio de la casa común. 

La metodología propuesta por el CEGINT parte de una revisión crítica de los enfoques tradicionales de aceleración empresarial, integrando las dimensiones ambiental, social y económica como elementos fundamentales para garantizar el crecimiento responsable y duradero de las organizaciones. En lugar de promover únicamente el rápido posicionamiento en el mercado, esta metodología reconoce la necesidad de generar estrategias que contemplen los límites de los recursos disponibles y los impactos que las empresas generan en su entorno. 

La integración de herramientas de diagnóstico basadas en estándares internacionales como los GRI permite establecer una base sólida para evaluar las condiciones actuales de las empresas y diseñar intervenciones que fomenten prácticas empresariales más sostenibles. Esto fortalece la toma de decisiones basada en evidencia, promueve la innovación con responsabilidad social y ecológica, y posiciona a las empresas como agentes activos en la construcción de un futuro más justo y resiliente. 

Asimismo, el enfoque colaborativo entre estudiantes, académicos, investigadores y empresas promueve la transferencia de conocimiento transdisciplinaria que enriquece tanto la práctica empresarial, como el desarrollo de nuestros estudiantes. Finalmente, el modelo de Aceleración Sostenible propuesto encuentra en la articulación, vinculación y alianzas entre gobierno, sociedad, universidades y sector productivo son clave para generar soluciones integrales que respondan a los desafíos actuales y garanticen el bienestar de las generaciones futuras. 

Referencias 

Barrio-Fraile, Estrella, Enrique-Jiménez, Ana María, Freire-Sánchez, Alfonso, & Vidal-Mestre, Montserrat. (2024). Análisis conceptual del propósito corporativo: Sostenibilidad, RSC, ODS y comunicación.. Cuadernos.info, (59), 251-272. https://dx.doi.org/10.7764/cdi.59.75543 

Freeman, C. (1987), Technology Policy and Economic Performance: Lessons from Japan, London: Pinter. 

Galarza, César José. (2022). Sostenibilidad y éxito empresarial. Cuadernos del Centro de Estudios en Diseño y Comunicación. Ensayos, (106), 16-27. Epub 05 de marzo de 2022.https://dx.doi.org/10.18682/cdc.vi106.4030 

Heijs, J., & Buesa, M. (2016). Manual de economía de la innovación. Tomo I: Teoría del cambio tecnológico y sistemas nacionales de innovación. Instituto de Análisis Industrial y Financiero, Universidad Complutense de Madrid. https://www.ucm.es/data/cont/docs/588-2016-05-17-AAA%20%20Manual%20EDI%20%20(Parte%201)%20Versi%C3%B3n%20Final%20publicada.pdf 

Instituto Nacional de Estadística y Geografía. (2020). Estadísticas a propósito del día de las micro, pequeñas y medianas empresas (datos del Censo Económico 2019). https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/aproposito/2020/mipymes2020_Nal.pdf 

Sistemas de Innovación: Ensayos Seleccionados en Economía Evolutiva, Editorial Edward Elgar Ltd, 2008. 

Lundvall, B.A. (1992) National Systems of Innovation: Towards a Theory of Innovation and Interactive Learning. Pinter Publishers, London.